Quienes laboramos en el ámbito de la  Educación, compartimos la responsabilidad y el privilegio de contribuir en una de las tareas fundamentales para el desarrollo y la prosperidad de la sociedad y, por ende, del país: la formación de  jóvenes que habrán de ser los ciudadanos que, en conjunto con las instituciones del Estado, decidan el rumbo de nuestra Nación. Desempeñar con eficiencia y eficacia nuestra labor son factores fundamentales para alcanzar el objetivo anterior. Hacerlo con honestidad, apego a la legalidad, vocación de servicio, respeto, equidad, amabilidad, inclusión, no discriminación de cualquier tipo y tolerancia hacia nuestros compañeros de trabajo, niños, jóvenes y ciudadanía en general, debe ser nuestro código de conducta como servidores públicos. Así mismo, es esencial actuar con transparencia y bajo la premisa de rendición de cuentas, así como preservar el medio ambiente.

Para alcanzar estos propósitos es necesario tener un referente ético y marco legal que oriente la conducta y sobre todo tener el conocimiento y acceso a toda esa reglamentación con la que como trabajadores de la educación estamos sujetos; por tal motivo, aquí se ofrece el espacio para acceder a ella, dando click en "Ir a la documentación" podrán descargar los acuerdos, las normas y todo el fundamento de nuestra labor docente.